viernes, 5 de diciembre de 2008

30 años de Constitución, un camino hacia la igualdad


"La igualdad entre géneros llegará cuando las mujeres puedan cometer los mismos errores que los hombres y no se las insulte por ello". Amelia Valcárcel.Filósofa

Para las mujeres, la instauración de la democracia en España significó el reconocimiento de la igualdad de derechos, que posteriormente se plasmó en distintas leyes que les otorgaban el estatuto de ciudadanía.
La Constitución Española de 1978 constituye un avance cualitativo y cuantitativo en el reconocimiento de los derechos de las mujeres.

A partir del reconocimiento de la igualdad ante la ley y de la prohibición de discriminación por razón de sexo tuvieron que modificarse leyes vejatorias para las mujeres, entre otras, las que obligaban a la mujer casada a obedecer al marido y atribuían a éste la administración exclusiva de la sociedad de bienes gananciales, el padre detentaba en exclusiva la patria potestad sobre la prole, hasta el punto de que podía dar en adopción un hijo o hija sin el consentimiento de la madre; el aborto estaba penalizado, en cualquier supuesto, igual que la píldora anticonceptiva.
La Ley 22/1978 despenalizó el delito de adulterio que sólo podía cometerlo la mujer casada que mantenía relaciones sexuales con otro hombre que no fuera el marido; cuando el hombre realizaba la misma actividad sexual se llamaba amancebamiento y no era delito.
Hasta esta fecha la mujer que tenía descendencia de una relación extramatrimonial no podía reconocerla como propia porque hacerlo constituía una prueba del delito de adulterio, en estos casos podía darse la circunstancia que el o la hija estuviera reconocido por el padre y constara como de madre desconocida.

A pesar de los avances que han supuesto las anteriores leyes y otras como la Ley Integral Contra la Violencia de Género, aprobada hace un año por unanimidad de todos los grupos parlamentarios, la discriminación por razón de sexo continúa estando instalada en la estructura social y es estructurarte de la sociedad futura.

En la medida que las mujeres se incorporan a la vida pública, se evidencia como, históricamente, han sido excluidas de las decisiones sobre la vida colectiva, a modo de ejemplo, de la Constitución Española de 1978 sólo se conocen los padres, las madres son desconocidas o no reconocidas. Leer artículo completo.
Maria Duran Febrer es abogada y ex secretaria de European Women Lawyers Asociation.

No hay comentarios: